Día de los muertos… tradición mexicana
Día de los muertos… tradición mexicana
Todavía recuerdo las palabras de mi abuela Agustina.
«Justo a las doce de la noche el portal se abre para dejar pasar a las almas de los niños muertos y los que no alcanzaron a nacer. Mañana vendrán los mayores y vienen a convivir con la familia. Ellos vienen y están con nosotros, nos ven y nos escuchan. No debemos estar tristes porque si ven que sufrimos no vuelven.»
En estos días la muerte en México vuelve a la vida. Hemos encontrado un consuelo para la ausencia de los que ya no están físicamente, por eso la muerte es vista como una celebración.
En los hogares mexicanos desde ayer, se levantó el altar a los niños con dulces, panes, calaveritas de azúcar, chocolate, juguetes, velas, flores, comida y por supuesto la foto del difuntito. Se reza y se da la bienvenida al alma que estará hasta las 12 del 2 de noviembre. En estos días la familia no trabaja. No se lava ropa, ni la loza, ni se cocina.
Mi abuela decía: “¡cómo te vas a poner a hacer algo si tienes visita!»
No se sale a ninguna parte excepto al cementerio. Así que es un evento muy serio, pero que dura todo el día, con música y comida.
Justo a un lado del altar de niños se hace otro para las almas de los mayores. Éste incluye todo. Desde coca-cola, café,… hasta cigarros. En general, lo que al difunto le gustaba en vida. También se coloca una ofrenda para «el alma olvidada», aquella que viene pero no encuentra a nadie que la recuerde.
Cada altar es distinto y cada región tiene su costumbres. En lugares como Michoacán se sacan los huesos de la tumba y se incluyen también en el altar. Se acude al cementerio y entonces la celebración es ahí. Se tiende el mantel encima de la tumba y ahí se monta el altar. Es una celebración muy bonita y con mucho significado. El lugar se ilumina con cientos de velas, se respira el olor a flores, velas, comida, incienso, mucho color y olor.
Si han tenido la oportunidad de ver la película “Coco” se podrán hacer una idea y lo emotivo que es cuando logras entenderlo.
Mi abuela decía que «gracias a las velas el camino de las almas se alumbra» por eso se hacen velas especiales para estos días y aunque ahora me encuentro muy lejos de mi tierra hoy, yo también enciendo la vela… después de todo los abuelos vienen mañana.