El pasado que hace el presente
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El pasado que hace el presente
El pasado, creo yo, que para casi todos es muy importante. A ver, el pasado es de lo que se forma nuestra historia, todo lo que hayamos hecho en él nos afecta en el presente, y eso que ya no existe. Nuestras decisiones, fallos y aciertos, nuestros viajes, conocer a gente, todo lo que vamos haciendo a lo largo de nuestra vida se va convirtiendo en pasado, es una gran parte de lo que nos define en general. Incluso el presente y el futuro se convierten en pasado.
El pasado tiene su parte buena y mala
Creo, también, que el pasado es en lo que más piensa la gente, porque con el simple hecho de recordar, significa que ya estás en él. Ese beso que te dio el chico o la chica que te gusta o gustaba, esa carrera que ganaste, ese examen que aprobaste, e infinitos ejemplos de posibles recuerdos. Está claro que no todo es bueno, hay veces en que las cosas que recordamos son experiencias malas, algo muy desagradable, una mala acción o decisión, etc., como casi todo en la vida, el pasado tiene su parte buena y mala.
El pasado tiene un poderoso impacto en el presente. Nuestras experiencias anteriores moldean nuestra forma de pensar, nuestras decisiones y nuestras acciones diarias. Los errores y los triunfos del pasado nos enseñan lecciones valiosas que aplicamos en el presente. Además, nuestras conexiones con el pasado, como nuestras raíces familiares y culturales, influyen en nuestra identidad y en cómo nos relacionamos con los demás.
Solución para el pasado
Una solución para el mal pasado, bajo mi punto de vista, es el olvidar. Sin embargo, también hay que pensar que nuestros fallos del pasado nos ayudarán a aprender y a no cometerlos en el futuro, y una vez lo hayamos corregido y hecho bien, se convertirán en una acción o decisión buena del pasado.
Otra cosa mala de un tiempo anterior es que mucha gente se queda estancada en él. Yo las animo, a esas personas, a seguir, no es sano vivir siempre en aquello que ya pasó, no nos deja avanzar en la vida para poder disfrutar nuevos momentos que se convertirán en buenos recuerdos. Yo los animo a que no dejen de aprender de sus fallos para mejorar, ni dejen de recordar las cosas buenas del pasado, sin dejar de vivir el presente, pronto nosotros también nos convertiremos en un recuerdo del pasado.
Es increíble como una simple palabra encierra todo lo vivido…
El presente, una oportunidad para hacer las cosas de manera diferente
Si bien no se puede cambiar el pasado, podemos encontrar soluciones para lidiar con las consecuencias que nos ha dejado. Una solución para el pasado es aprender de él y utilizar esas lecciones para tomar decisiones más informadas en el presente.
También podemos buscar el perdón y la reconciliación, tanto para nosotros mismos como para aquellos que pudieron haber sido afectados por nuestras acciones pasadas. Además, podemos buscar terapia o asesoramiento para ayudarnos a procesar y superar traumas o eventos negativos del pasado.
Finalmente, es importante recordar que el presente es una oportunidad para hacer las cosas de manera diferente y construir un futuro más positivo. Aprendiendo del pasado, podemos tomar medidas para cambiar nuestro rumbo y crear una vida mejor.
Pasado y presente entrelasados
No podemos cambiar el pasado, pero podemos aprender de él para construir un presente más sólido y prometedor. Reconocer la influencia del pasado nos permite tomar decisiones conscientes y crear un futuro mejor. El pasado y el presente están entrelazados, y solo al entender esto podemos avanzar hacia un futuro más brillante.
- «El pasado es un prólogo», William Shakespeare (1564-1616)
- «El pasado siempre está presente», Maurice Maeterlinck (1862-1949)
- «El pasado me ha revelado la estructura del futuro», Pierre Teilhard de Chardin (1881-1955)
- «Añorar el pasado es correr tras el viento», Proverbio ruso
- «Si no quieres repetir el pasado, estúdialo», Baruch Spinoza (1632-1677)