El síndrome de la cabaña: qué es y cómo prevenirlo
Después de todo este tiempo confinados en casa a causa de la COVID-19, parece que ya empieza a haber algo de movimiento. Por grupos de población y por franjas horarias, pero, por fin podemos, aunque con limitaciones, salir a la calle. Ya el tiempo dirá si es una decisión acertada del Gobierno o no, pero, no es lo que nos trae hoy aquí. El tema que le ocupa y preocupa hoy a esta Mirilla es el llamado “síndrome de la cabaña”. ¿Has oído hablar de él? Veamos qué es y algunos tips para prevenirlo.
El síndrome de la cabaña: en qué consiste
La denominación surgió a principios del siglo XX en EEUU, en las zonas del país en que se sufrían largos inviernos. Con ella se hacía referencia al estado mental que experimentaba la gente después de pasar esos meses aislados. Realmente no está reconocido como un problema mental en sí, pero sí que engloba una serie de síntomas que van desde la depresión o irritabilidad a la inquietud, la sensación de frustración o el desasosiego. Todos ellos generados tras una situación de aislamiento, más, o menos larga, como podría ser la que vivimos actualmente.
Realmente no está reconocido como un problema mental en sí, pero sí que engloba una serie de síntomas que van desde la depresión o irritabilidad a la inquietud, la sensación de frustración o el desasosiego. Todos ellos generados tras una situación de aislamiento, más, o menos larga, como podría ser la que vivimos actualmente.
Temor a salir a la calle de nuevo
No es de extrañar en los tiempos que corren, que después de tanto tiempo sin poner pie en la calle, a más de uno se le haga cuesta arriba esto de salir. Y es hasta normal. Con la limitación de movimiento y el poco consumo de energía durante el confinamiento, el cuerpo de muchos ha acabado por acostumbrarse. Y esto muchas veces deriva en la autogeneración de la sensación de miedo o temor a salir a la calle de nuevo y, en definitiva, a lo que pueda pasar cuando eso suceda.
Cómo prevenir los síntomas del síndrome
Está claro que las personas con más riesgo de caer en las redes del “síndrome de la cabaña” son las más vulnerables al virus. Los mayores, sobre todo. El miedo a contagiarse hará que intenten alargar su aislamiento. Pero también están en riesgo las personas hipocondríacas o las que sienten rechazo social, ya que en confinamiento es donde encontrarán protección.
Los expertos aconsejan algunos tips para no vernos atrapados en este síndrome:
- Intentar llevar una vida ordenada, y en la medida de lo posible, mantener una rutina. Una rutina parecida a la que teníamos antes de estar confinados, al menos en horarios.
- Cuidar nuestra alimentación para que sea lo más sana posible.
- Hacer algo de ejercicio de forma periódica.
- Mantener contacto con el exterior a pesar del confinamiento, con familiares y amigos, a través no sólo del teléfono sino de las nuevas tecnologías.
- Pensar en futuro, en qué vamos a hacer cuando salgamos.
