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¿Porqué mi perro se marea en el coche?

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Me dijo que era relativamente frecuente en los perros, sobre todo en los cachorros. Y mientras acariciaba el lomo de Taco, me explicó algunas cosas interesantes sobre el porqué mi perro se marea en el coche.

No es un secreto que el coche se ha convertido en los últimos tiempos en un elemento indispensable en nuestras rutinas diarias de vida. Por ello, educar a nuestras mascotas a los paseos en él, es de vital importancia. Y no sólo para que les pierdan el miedo a ir en él, sino para que no se pongan excesivamente nerviosos y se mareen en trayectos relativamente largos.

Pero… ¿por qué mi perro se marea en el coche?

En la mayoría de los casos, y como acabo de decir, es un problema más que nada, de adaptación al movimiento del coche. Por esta razón es más frecuente que se de en cachorros, cuyos oídos están en proceso de desarrollo y por eso es más complicado que se adapten al movimiento y mantengan el equilibrio del todo. Y bueno, a ello le puedes sumar otros factores como el miedo o el estrés durante el propio viaje, intensificado doblemente si el camino está repleto de inevitables curvas, la conducción brusca, comidas copiosas, sobreexcitación…

Observarás que se está mareando si notas en él cierta ansiedad. Si ves que tiembla, se queja, llora, se mueve incómodo, y tiene salivación excesiva tendrás la certeza. Si observas estos síntomas, ten claro que tu perro no está disfrutando para nada del viaje y acabará con vómitos o diarrea.

Qué hacer para evitar que se maree y disfrute con el paseo en coche

Si es cachorro tendrás que enseñarle, aunque educarlo para que se adapte te será más fácil. Si tu perro tiene una edad más avanzada los pasos serán los mismos, pero tendrás que tener un poco más de paciencia.

Si es cachorro tendrás que enseñarle, aunque educarlo para que se adapte te será más fácil. Si tu perro tiene una edad más avanzada los pasos serán los mismos, pero tendrás que tener un poco más de paciencia.

Te dejamos a continuación algunos tips para empezar a familiarizar a tu perro con el coche y, en consecuencia, evitar que se maree:

  • Acostúmbralo al coche parado. Sube y baja con él varias veces, juega con tu perro dentro y por los alrededores del coche,… También puedes esconder premios dentro y jugar con él a encontrarlos o incluso acostumbrarlo a que se duerma un ratito dentro.
  • Intenta que se relaje con el coche en marcha. Siempre que puedas llévalo contigo en el coche. Hazlo poco a poco, preferiblemente con el estómago vacío y premiando su actitud para que no tenga miedo. Coloca junto a él su juguete preferido o una manta que suela usar para que todo le suene familiar. Y bueno, fundamental que se adapte cuanto antes a viajar en transportín o con cinturón de seguridad; el mecanismo que prefieras para que viaje de forma segura.

  • Empieza con paseos cortos. Intenta tomar las curvas de forma brusca en la medida de lo posible y al acabar el trayecto prémialo con caricias, alguna golosina o con un rato de juego. Si lo haces de forma continuada, acabará subiéndose al coche incluso antes que tu, esperando la recompensa que obtendrá luego. Y por supuesto, no lo subas al coche sólo para ir a sitios que él asocie con algo desagradable como al veterinario, sino también para ir a algún parque, a alguna zona rural, o simplemente salir de paseo o excursión.
  • Prueba de fuego con viajes más largos. Si has llevado a cabo los pasos anteriores, ya es hora de que te aventures a paseos en coche más largos. En estos casos ofréceles un viaje relajado y tranquilo, sin acelerones ni brusquedad. Airea el coche antes de subirlo y durante el viaje deja que respire aire fresco abriendo las ventanillas. Dale un paseo antes de subirse para que haga sus necesidades, libere la energía que tiene acumulada y se relaje. Para cada dos o tres horas, para que estire las piernas, juegue un poco o haga sus necesidades y, como dijimos antes, es recomendable que esté sin comer dos o tres horas antes de empezar el viaje.

  • Un último remedio. Como última opción, igual que para las personas, existen medicamentos contra el mareo para ayudarles a que el viaje no sea tan traumático. Hay unos específicos para evitar el vómito nada más, y otros que tratan de evitar esa ansiedad causándole una relajación muscular. En cualquier caso, será tu veterinario el que te indicará cual es la mejor opción.

Y si con todo, el problema no disminuye coméntalo al veterinario para que examine a tu perro y descarte cualquier problema de oído que pueda estar causando sus mareos. La experiencia de llevar a tu perro en coche.

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